Descripción
Descripción
MWF es una solución concentrada que contiene un componente único, soluble en aceite, de molibdeno junto con aditivos que evitan la "soldadura" de materiales bajo presiones extremadamente altas.
La función de los lubricantes destinados a herramientas de mecanizado y conformado es reducir la fricción y, por lo tanto, la generación de calor, que de otro modo resulta en deformaciones de las piezas mecanizadas y falta de precisión en la producción, así como pérdida de rendimiento, lo que lleva a una disminución de la producción (no se pueden utilizar velocidades más altas y técnicas de producción continuas). Para comprender con precisión la función de MWF , es necesario darse cuenta de que MWF crea una capa protectora de disulfuro de molibdeno MoS, que tiene propiedades altamente deslizantes y, al mismo tiempo, resistencia a presiones extremas. Esta capa también resiste grandes fuerzas de compresión generadas por la herramienta de trabajo. Donde procesamos metales que son relativamente frágiles y fácilmente mecanizables, generalmente no hay problemas significativos. Por otro lado, donde procesamos aceros tenaces y materiales ductiles, se puede observar un aumento significativo en las presiones de corte. Esto puede resultar en la acumulación de material en el filo de la herramienta, lo que lleva a atascos y sobrecalentamiento. Esto, por supuesto, conduce a un desgaste acelerado de la herramienta de corte y acumulación de problemas. En materiales altamente tenaces, aceros inoxidables, etc., fenómenos acompañantes como el temple local debido a altas temperaturas y la formación de una capa viscosa en la superficie resultan rápidamente en sobrecalentamiento y falta de precisión en la producción, si no se toman medidas a tiempo. La capa de MoS en el filo de la herramienta crea una superficie altamente deslizante que facilita el corte del material y, por lo tanto, una reducción significativa del calor generado, mejorando así las condiciones de trabajo de la herramienta de corte. Naturalmente, los líquidos de corte se utilizan siempre que sea posible para disipar el calor de la pieza de trabajo y de la herramienta. Sin embargo, si utilizamos el aditivo MoS, el problema del calor se aborda simultáneamente desde dos perspectivas: la disipación de calor y, al mismo tiempo, la reducción de la fricción, lo que proporciona garantías de éxito significativamente más altas. En la práctica, se ha demostrado que, por ejemplo, en aceros inoxidables se pueden lograr aumentos dramáticos en las velocidades de corte y la precisión del mecanizado. Las economías en la prolongación de la vida útil de las herramientas de corte tampoco son despreciables.